Crítica de ‘La luz entre los océanos’: una buena historia

Bello momento cuando vas al cine y realmente sentís que te están contando una buena historia. Eso es lo que me pasó al ver «La luz entre los océanos»

¿De qué se trata?

El relato se sitúa en 1926 en Australia. Tom (Michael Fassbender) es el encargado del faro de una remota isla, donde vive con su esposa Isabel (Alicia Vikander). La pareja tiene problemas para tener hijos pero su vida cambia cuando un bote con un bebé encalla en la isla y deciden criarlo como propio.

Alfa Films

«La luz entre los océanos», del libro al cine

El film está basado en el best seller homónimo de M.L. Stedman y la buena noticia es que se nota. Aquí lo que importa es la historia, y bienvenido sea.

«La luz entre los océanos» es un melodrama de época con algunas singularidades que suman, como el estado de aislamiento de los protagonistas durante al menos la mitad del metraje. La película, si bien puede resultar algo lenta por momentos, tiene el mérito de no apresurarse y detenerse el tiempo debido en la vida de los personajes.

Alfa Films

Otro logro del film es su falta de previsibilidad: no es obvio cómo va a terminar y eso no es poca cosa. Me gusta ver una película que realmente te tiene esperando para saber cómo concluye.

Y esto va de la mano de personajes multidimensionales que cruzan el límite de lo correcto y sin darse cuenta se paran en la fina línea que divide a la víctima del victimario. Los personajes no son solo entes que realizan acciones sin sentido para justificar la trama, sino personas con sentimientos, emociones y contradicciones que caminan por la vida tratando de amar, ser amados y alcanzar la felicidad. Tan simple y tan profundo como eso.

¿Ver o no ver «La luz entre los océanos»?

Tal como te decía al principio, una buena historia merece la pena ser vista. A esto hay que sumarle la bellísima dirección de fotografía y las perfectas actuaciones de los protagonistas (me animo a decirte que quizás Alicia Vikander se lleve alguna nominación). El director Derek Cianfrance no corre detrás de golpes bajos y efectistas, sino que muestra humanidad en cada detalle. Una buena película que no decepciona.

Título original: The light between oceans
Duración: 132 minutos
País: Reino Unido / Nueva Zelanda / Estados Unidos
Año: 2016